domingo, 17 de octubre de 2010

Episode V: Brunettes strike back

Con la llegada del otoño estoy empezando a notar un fenómeno importante, la disminución de las horas de luz. La oscuridad empieza a apoderarse de la ciudad, pero no sólo de ella. La oscuridad ha comenzado a invadir las cabelleras otrora rubias de las vikingas, que con el cambio de temporada parecen haber decidido unánimemente teñirse de castaña o morena. Así es amigos, las noruegas ya no quieren ser rubias.

Es curioso observar este suceso, aunque tampoco es novedoso. ¿Cuántas rubias de bote hay en España? No me parece mal perder la exclusividad de la melena morena (que tampoco la tenía porque aquí hay mucha inmigración), lo que me llama la atención es ver cómo chicas que estarían muy guapas con su color de pelo natural se ponen uno que hacen que resalte exageradamente lo blancas que están. Aunque lo mismo es que son fans de Crepúsculo, nunca se sabe. De esta saga ya hablaré en un post futuro, porque es como para echarle de comer aparte. Muchas veces en España recuerdo haber visto mujeres rubias (de bote) con las raíces negras asomando y pensaba que eso quedaba horroroso. Sin embargo, en Noruega (aunque supongo que también pasará en otros países) se produce a veces el fenómeno contrario: morena de bote y raíces rubias. Es aun peor. Este fenómeno da lugar a un efecto visual por el cual se confunden las raíces rubias con ausencia de pelo. Este hecho puede ir en ocasiones ligado, aunque no necesariamente, a otro factor: si tienes el pelo muy fino y eres rubia no pasa nada, apenas se nota y sigues estando mona, pero si te tiñes de morena parecerá que tienes 4 pelos contados.

Estoy hablando mucho de las chicas, pero lo de teñirse no es sólo cosa suya. Es impresionante la cantidad de vikingos (rubios) que se tiñen de morenos. Me consta que en general son muy de gimnasio y de modernismos (lo último son las gafas de Treholt), pero no me esperaba esa coquetería.


Mención aparte merecen las chicas de origen indio o pakistaní que se tiñen de rubias con el bien conocido resultado de pelo amarillo pollito que tampoco es especialmente favorecedor.

Podría resumir diciendo que para gustos hay colores y que uno nunca está a gusto con lo que tiene. Así que siempre nos quedará la opción de cortarnos el pelo bien cortito y teñirlo con estampado de leopardo sobre fondo verde (visto en Oslo no ha mucho tiempo atrás).

Ha det bra!

4 comentarios:

  1. hehe, sé muy bien de lo que hablas, y te has fijado en los manikis? todas son morenas de pelo Y DE PIEL !!!!!! justo lo contrario de españa! :D :D

    paso por tu blog por recomendación de Nieves hehe

    Disfruta de la experiencia!

    Ha det !!

    p.s. el finde que viene hay fiesta en la St.Hanshaugen, el viernes 29 !! que te avise nieves ;)

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  2. Hola descubri tu blog gracias a otro blog ! Me gusta mucho . Yo soy una fan de Noruega , paso todas mis vaciones, yo soy de España ( Ibiza ).
    Ya me uni a tus seguidores.
    Un abrazo y pasalo en grande !!
    Maria

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  3. Migue_sevi, me había fijado en los maniquís. Es algo muy curioso. Es que ser moreno proporciona una exoticidad tan elevada...:D
    Gracias por lo de la fiesta, ya le preguntaré a Nieves, qué maja me hace publicidad :D

    Ha det!

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  4. Maria..., me encanta que te guste mi blog, es alentador que te digan cosas como esa. A mi también me gusta mucho Noruega, pero aun me queda experimentar el frío extremo(dicen que mañana ya va a nevar). Espero no defraudar a mis seguidores.

    Un abrazo ;)

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